Consecuencias de no dormir lo suficiente y de dormir demasiado

Si existe un consenso en cuanto al sueño es que dormir es una actividad absolutamente necesaria e imprescindible para la salud. Pues durante la función del sueño se llevan a cabo funciones fisiológicas para el equilibrio psíquico y físico de las personas tales como: restablecer el almacenamiento de energía y consolidar la memoria. Pero los extremos no son recomendados, al igual que dormir poco, el exceso de sueño puede traer consecuencias negativas a la salud. 

Según la Revista Médica Clínica Las Condes, la cantidad de sueño ideal de un adulto es de 7 y 8 horas por noche para mantener una buena salud y bienestar. Recordemos que descansar no es sólo necesario para mantenerse alerta y concentrado durante el día, sino que al dormir recargamos y recuperamos el cuerpo de las cargas y fatigas diarias.

Sin embargo, existe la evidencia práctica de que cada individuo debe satisfacer su “cuota de sueño” para sentirse bien. La necesidad de sueño puede cambiar de acuerdo a la edad, al estado de salud, estado emocional y otros factores, cuya duración oscila entre 6 y 12 horas.

Algunos duermen más y otros menos, pero hay personas que superan estos números en donde cada extremo tiene consecuencias negativas. A continuación te contamos las implicancias de no descansar lo necesario y de dormir más de la cuenta. 

¿Cuántas horas es demasiado?

Las personas que habitualmente duermen fuera del rango normal pueden presentar signos o síntomas de problemas de salud graves o, si se realizan voluntariamente, pueden estar comprometiendo su salud y bienestar, según un paper publicado por la National Sleep Foundation

Dicho estudio indicó que no está recomendado dormir menos de 6 y más de 11 horas para los adultos jóvenes de entre 18-25 años de edad. Mientras que para los adultos de entre 26 y 64 no recomiendan dormir menos de 6 y más de 10 horas. 

Se señaló que dormir entre 7 y 9 horas es lo ideal. 

Dormir mucho enciende alerta de enfermedades

Si dormimos más de lo recomendado, esto puede ser un síntoma de alguna enfermedad. Para el caso de adolescentes, puede significar depresión, problemas de hipotiroidismo, diabetes o un cambio de ritmo. En los adultos, dormir mucho también se relaciona con la depresión pues incide en el estado de ánimo.

También, se producen alteraciones metabólicas porque disminuye la actividad física y comemos fuera de los horarios correspondientes. De manera que no es raro que se presenten problemas de peso como la obesidad. En suma, se incrementa el riesgo de desarrollar y sufrir diabetes pues al dormir tanto se elevan los niveles de azúcar en la sangre. 

El sueño excesivo está relacionado con la pérdida de atención y memoria. Puede afectar la concentración y la correcta actividad del cerebro en nuestra rutina diaria. Además, aumenta el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.

¿Y si duermo poco?

La falta de sueño puede ocurrir por numerosas razones tales como el consumo de pantallas y tecnología por tiempos prolongados o por trastornos del sueño, como el insomnio o la apnea obstructiva del sueño, según lo indican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). 

Si dormimos menos de 6 horas, no solo sentiremos cansancio, irritabilidad y ansiedad, sino que nuestro sistema inmune se verá debilitado. Resulta que durante el sueño, se refuerza nuestra respuesta inmune innata y aumenta la memoria inmunológica. Esto se refiere a la capacidad del organismo de defendernos ante una infección futura.

Además, puede afectar la liberación de las hormonas que ayudan a crear masa muscular, combatir infecciones y reparar células. 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) insiste en que dormir no es un placer sino una necesidad. Según los CDC, si no descansamos lo suficiente, aumenta el riesgo de varias afecciones crónicas como: 

  • Presión arterial alta
  • Enfermedades del corazón
  • Accidentes cerebrovasculares
  • Enfermedad del riñón
  • Obesidad
  • Diabetes tipo 2

Yoga online: de los pies del Himalaya a las redes sociales

Tras una lesión, Natalia comenzó probando clases de Bikram
Yoga, pues no podía practicar ningún deporte de impacto. Le gustó
tanto, que el siguiente paso fue implementarlo en su día a día, a tal
punto que decidió viajar a la India, realizar 200 horas y formarse
como instructora de yoga en la escuela Rishikul YogShala. Hoy, la
periodista Natalia Gálvez, de 31 años, ha logrado dedicarse tanto a
su profesión como al yoga, impartiendo clases online y trabajando
para una compañía de la industria cosmética.

La historia de Natalia Gálvez en el mundo del yoga comienza tras
un lesión que le impedía practicar deportes de impacto. Un día
decidió probar el Bikram Yoga, estilo de yoga que se practica a 42°
de calor. Desde aquel momento, nunca más abandonaría esta
disciplina, pues le brindó un equilibrio y bienestar físico, mental y
espiritual.


Si bien ella había estudiado periodismo y ya tenía un trabajo
estable, viajó a la India, país en donde se originó el yoga, para
formarse como instructora y traer los conocimientos aprendidos de
vuelta a Chile.


Actualmente ha logrado de dedicarse tanto a las comunicaciones
como al yoga. Trabaja en “Natura” y, en paralelo, realiza clases de
yoga particulares y grupales de manera online.

¿Cuándo comenzaste a realizar yoga?

El 2017 llegué a un estudio de Bikram Yoga porque tengo una discopatía lumbosacra, por lo tanto, no podía practicar ningún deporte de impacto y quería realizar algo que fuese compatible con mi lesión.


La instructora cuenta que estuvo un año practicando yoga de
manera continua, lo que la hizo descubrir que su pasión era fluir
sobre el mat. Tanto así, que fue integrando la práctica más allá
de éste: “empecé a vivir el yoga en mi día a día y en cada acción
que realizaba”.


Un año después, durante 2018, y mientras leía el libro “Mamá
India”, sintió una invitación a descubrirse de verdad.


“Mamá India decidió invitarme a revelarme que existe una forma más bonita de relacionarme conmigo misma, con el mundo en el que vivo y con los demás; y que potencia mi esencia más pura. Así me convertí en instructora de yoga, a los pies del Himalaya.”


¿Cómo fue aquella experiencia?
En verano de 2018, estaba trabajando en un medio de comunicación y decidí tomarme vacaciones para ocupar esos días viajando a India para estudiar yoga. Vi la oportunidad y lo tuve claro: compré los vuelos que me llevarían a Rishikesh -al norte de India y a orillas del Ganges-, armé una mochila para un mes y me fui a exprimir la experiencia.


Conocí gente bella que se convirtió en familia, me repleté de conocimiento yóguico tradicional, de prácticas sanadoras, de baños en el río sagrado, de alguna pequeña cornada vacuna y robos de monos que andan libres por las calles. En fin, regresé a Santiago sintiéndome más Natalia que nunca y con una formación en hatha y asthanga vinyasa de 200 horas en la escuela Rishikul YogShala.


Ha sido difícil sobrellevar la cuarentena, ¿Te ha ayudado el yoga?
Es difícil para todxs sobrellevar un confinamiento, sumando a un contexto de muertes que no se visibilizan de manera tangible porque hemos perdido nuestros ritos con la pandemia. Para mí en particular, no ha sido fácil, paso por muchas emociones a diario, pero es muy importante dejarlas fluir y abrazarlas.

Natalia asegura que el yoga la ha ayudado mucho en esto. Logra conectarse consigo misma llevando la atención a la respiración, meditando y logrando calmar su mente. Afirma que uno de los objetivos del yoga, es practicar el desapego: un método que consiste en no dejarse llevar por el engaño o la atracción de las identificaciones mentales.


“Eso lo practico a diario, desapegándome o soltando cualquier idea negativa. Siempre trato de visualizarme y crear una intención positiva para cada día. Es una herramienta súper transformadora y motivadora que refuerza nuestro propósito y actúa como ancla en los momentos adversos”.


“Una muy linda práctica que puedo recomendar es que desde que te despiertes, tomes unos segundos para visualizar un pensamiento que te inspire. Visualízate con la emoción de estar realizándote en esa versión que quieres para ti, que te eleva y a través del ejemplo, ayuda a elevar a los demás ¡Elévate y mantén tu energía en alto en estos momentos!”.


Muchas personas han optado por encontrar su bienestar a través
del Yoga, se graban practicándolo y publican en redes sociales
su progreso ¿Cómo crees que ha sido ese impacto?


Yoga significa unión, con la vida, la energía y el universo. Me encanta que en estos momentos estemos más unidos que nunca, por la plataforma que sea. Las RR.SS. sin duda tienen un gran alcance -que en este caso con el yoga- es muy bonito e inspirador. Y podemos impactar o motivar a otros a preocuparse por su bienestar. Y eso es muy positivo.


El yoga es una práctica transversal que cualquier puede llevar a cabo en la casa. Natalia asegura que debes encontrar un lugar tranquilo donde quede cómoda tu esterilla, tapete o mat de yoga. Idealmente no deben haber corrientes de aire, ni gente interrumpiendo el momento, pues es un espacio para conectarte contigo mismo.


“Además del espacio, solo necesitas una mente y un cuerpo presentes y dispuestos. Basta con ropa cómoda y sencilla, pies descalzos para conectarnos con la tierra, tiempo para ti y para abrir tu corazón a nutrir el cuerpo, relajar la mente y elevar el espíritu”.


¿Necesitamos tener mucha flexibilidad para poder hacer yoga?
Me impresiona que lo primero que muchas personas hacen al tomar una clase de yoga, sea disculparse por no tener flexibilidad. Y la verdad es que claro, “el estereotipo” de una práctica de yoga o lo primero que sale en internet si buscas la palabra yoga, es una postura o una imagen de un yogui súper flexible. Y sí, son muy bonitas, pero no es todo. Además, hay que recordar que la práctica del yoga no solo trabaja el cuerpo físico.

La flexibilidad no es un requisito para practicar yoga, muy por el contrario. Si sientes rigidez, poca agilidad y quieres mejorar en esos aspectos, eres la persona indicada para practicar. No necesitas nada, solo conectarte contigo y con un instructor o instructora que te enseñe a practicar con humildad, paciencia y disciplina. Con la práctica, el cuerpo va cediendo y se va soltando.


¿Todos pueden practicar yoga?
El yoga nos invita a conectar con el momento presente y a unirnos a todxs. Cualquier persona se puede iniciar en el mundo del yoga. Niñxs, adultos, adultos mayores y hasta las personas que tienen alguna lesión o no tienen la movilidad suficiente para realizar algunas asanas (posturas de yoga) pueden practicar adaptado a sus necesidades; y todxs podemos tener una práctica de meditación, relajación y pranayamas (ejercicios de respiración).
Tenemos que tomar consciencia de que todos nuestros cuerpos son distintos y que existen muchos tipos de yoga, así que no hay una medida exacta que funcione igual para cualquier persona. La clave para sacar el mayor provecho del yoga está en tu mente.


¿Hacer yoga nos ayuda a lograr un mejor descanso, un buen
dormir?

Sí, absolutamente. Muchas posturas nos ayudan a recuperar nuestro equilibrio natural, calmar nuestro sistema nervioso, mejoran nuestro sistema digestivo y reducen el estrés. Además, podemos activar la circulación de la sangre, mejorar la respiración y calmar nuestros latidos del corazón, ayudando al cuerpo a relajarse.


La instructora asegura que algunas posturas ideales para realizar como rutina antes de dormir y garantizar un buen descanso son: Balasana (postura del niño), Urdhva Mukha (perro mirando hacia arriba), Ustrasana (postura del camello), Baddha Konasana (postura de la mariposa), Supta Matsyendrasana (twist superior), Setu Bandha Sarvangasana o (postura del puente), Apanasana (rodillas al pecho) y Savasana (postura del cadáver).


Un pranayama ideal para realizar antes de dormir también es Bhramari: una práctica tranquilizante que equilibra nuestros hemisferios del cerebro, y que tiene como principal objetivo inducir a un estado meditativo, que nos facilite la audición del sonido interno.


¿Beneficios?
Es perfecto para antes de meditar o dormir. Calma las emociones y elimina la ira o la ansiedad porque nos vuelve a conectar con nuestro pulso, nuestro ser. Realizar -idealmente- unas 5 repeticiones antes de dormir. La práctica diaria, incrementa al instante la sensación de calma.

Si quieres practicar esta disciplina y vivir “Tu Bienestar Flex”, te
invitamos a la clase que Natalia Gálvez estará impartiendo a través
de un live de la cuenta de Instagram Flex Chile. Será hoy 25 de
junio a las 20:00 horas ¡Nos vemos!

Consejos para el buen dormir

Cada noche estamos expuestos a diferentes estímulos que perturban nuestra calidad de sueño y hacen que permanezcamos despiertos más tiempo del que deberíamos. Expertos recomiendan que al momento de dormir, lo ideal es desconectarse de los dispositivos electrónicos y preparar la habitación para que sea un ambiente cómodo y silencioso. A pesar de esto, hay un factor que siempre se olvida: la posición correcta para dormir. 

¿Despiertas con dolor de cuello cada mañana? ¿Sientes que no has descansado a pesar de haber dormido 8 horas? Esto se debe, sin duda, a que al momento de dormir optas por una postura poco adecuada que, aunque tu sientas que es cómoda, no te permite descansar con plenitud. 

En esta nota te explicamos qué postura debes tener para despertar sin dolencias, y cuáles son las consecuencias a largo plazo de seguir durmiendo de manera incorrecta. 

Factores que debes tomar en consideración 

Dormir en una mala posición puede causar muchas dolencias. Dolor de espalda, dolor lumbar, en articulaciones o calambres, son algunas de ellas. A pesar de ser un tema conocido y mencionado por expertos, muy pocas personas conocen esta causa de dolor. Sin embargo, la postura no es el único factor, aquí te dejamos algunos elementos que debes considerar al momento de dormir que te ayudarán a obtener una buena postura. 

1. Acude a un experto: a pesar de que está demostrado que algunas dolencias en el cuerpo son producto de malos hábitos de sueño y de una incorrecta posición al dormir, hay otras que no. Es importante acudir a un médico que revise los músculos y articulaciones, que pueda ofrecer la solución más adecuada. Cada cuerpo es diferente y tiene distintas necesidades.

2. Una buena almohada: es un elemento crucial para una buena postura en la noche. Por lo general, se recomienda a aquellas personas que tienen problemas de espalda, pero sin duda es un buen aliado del descanso. Si eres de esas personas que no puede dormir sin una, adquiere una que se adapte a tus necesidades.

3. Colchón: ocurre igual que con la almohada, debes elegir el modelo que mejor se adapte a tus requerimientos. Te invitamos a utilizar nuestro Recomendador para que conozcas cuál colchón es ideal para que duermas tranquilo toda la noche. 

Descansa y despierta como nuevo 

Como comentamos anteriormente, por las noches solemos adoptar una posición “cómoda” para dormir. En algunos casos, duramos toda la noche en la misma posición 

acción que a largo plazo le hace daño a nuestras articulaciones. Aquí unas recomendaciones según la posición en la que duermes y de qué lado debes dormir: 

Boca arriba con los brazos a los lados: considerada una de las mejores posiciones para dormir, ya que no da problemas de espalda y no provoca que la espina dorsal deba hacer mucho esfuerzo. Esta posición también es buena para dormir sin almohada aunque es considerada como una postura que incrementa los ronquidos. 

Posición fetal: una de las preferidas por todos. Se recomienda evitar que todo el cuerpo repose directamente encima de nuestras extremidades, ya que nos puede generar calambres al día siguiente. Evita esta posición si tienes un hombro fracturado o dañado. 

Boca abajo: considerada la peor posición para dormir, pues afecta a la posición natural de la espalda. Dormir boca abajo curvea y presiona las vértebras; además, el cuello se eleva y se comprime el estómago y los pulmones, impidiendo la capacidad de respirar profundamente, siendo que lo ideal es la oxigenación. 

De lado izquierdo: expertos recomiendan dormir de este lado que del derecho, en especial cuando la mujer está embarazada. Esta posición incrementa la cantidad de sangre y nutrientes que llegan a la placenta; además, la mamá puede respirar mejor que durmiendo boca arriba, ya que en esta posición los pulmones se comprimen. 

Recomendaciones que debes seguir 

Sin duda dormir es un de los momentos más placenteros para las personas, pero hacerlo en una mala posición puede conllevar problemas de salud si se mantienen en el tiempo. En los casos más leves, puede causar una postura anormal del cuello o de espalda y en otros puede hacer que nos levantamos con dolor de espalda (cervical o lumbar). Algunas recomendaciones al momento de dormir: 

1. En el caso de la columna cervical, es importante que la almohada esté alineada con la posición de la cabeza y el cuello, similar a la que tendríamos si estuviéramos de pie.

2. Evita dormir con los brazos estirados a los lados del cuerpo o doblados sobre el cuerpo. Se recomienda que no sobresalgan del borde de la cama para evitar compresiones sobre los nervios de las extremidades superiores.

3. Se aconseja tener un horario regular a la hora de irse a la cama, evitar el uso de aparatos electrónicos antes de dormir y durante el día dormir siestas que no excedan los 20 minutos. 

Tener una buena noche de sueño conlleva a un buen despertar. Saber la importancia de nuestra postura cuando dormimos y cómo acostarnos correctamente, sin duda hace la diferencia. Pon en práctica estos consejos y dile adiós a tus dolencias.

Consejos para dormir sin pasar frío

El invierno aún no llega pero las bajas temperaturas ya se empiezan a sentir. Mientras dormimos, resulta indispensable evitar pasar frío para poder descansar adecuadamente. Existen diversas tecnologías para abrigarse en la cama que varían no solo en costos, sino en los riesgos asociados. Conoce cuáles son y su correcto uso.

Cuando tenemos frío y dormimos mal abrigados podemos tener problemas al conciliar el sueño. Según expertos, si pasamos frío durante la noche se duerme mal y no descansamos lo suficiente, ya que tenemos un sueño más superficial. Es por esto que aquí te dejamos las distintas alternativas para que escojas el método más adecuado para ti o tu cama según tus preferencias. 

Calientacamas

Las frazadas eléctricas o calientacamas son una rápida forma de frenar el frío en la cama pues funcionan con electricidad. Sin embargo, tener uno implica riesgos como olvidar apagarlo y quemarse durante la noche. 

Han habido casos de incendios a raíz del uso irresponsable de calientacamas, por lo que deben contar con una certificación de seguridad que se puede reconocer como el sello SEC. Éste supone que el producto pasó por pruebas de laboratorio y ensayos, certificando  que se han minimizado todos los riesgos y el producto es seguro.

La recomendación es que su uso sea moderado, es decir, calentar la cama antes de acostarte y apagarlo al dormir. O bien, tener uno con timer, para que se apague solo y no quede prendido durante la noche. 

Guateros

Los guateros con agua hirviendo en su interior siempre son una económica opción para entrar en calor al acostarse. Si bien es una opción económica, puede significar un gran riesgo pues han habido casos en donde se revientan y terminan quemando y mojando. Lo recomendable es evitar llenarlo y sacarle el aire al cerrarlo, para que no quede inflado como un globo. 

Sin embargo, una alternativa sin riesgos son los guateros de arena o semillas, los cuales se calientan en el microondas durante pocos minutos. ¡Algunos tienen aromas!

Plumón

Para muchos, taparse con numerosas capas de  frazadas y mantas puede resultar incómodo al dormir bajo tanto peso. Hoy existe la tecnología que permite abrigarse con opciones más livianas: plumones. Éstos no consumen energía y resultan ser un excelente aislante.

Un buen plumón no genera calor, sino que impide que la temperatura se escape. Nos logra mantener lejos del frío durante la noche, pues son rellenos con plumas de buena calidad que conservan el calor. Entonces mientras mayor es el poder de llenado, hay más aire atrapado en el plumón y de esta manera la capacidad aislante es mayor. 

Pero la solución para evitar el frío no sólo recae en calentar la cama, sino que hay métodos para nuestro organismo. Ya sea en la tela de lo que vestimos, lo que ingerimos o los sitemas de calefacción utilizados en la habitación. Aquí te dejamos otros consejos para que sigas, porque recuerda: si hay frío, no hay descanso.

Beber líquidos calientes

Una rápida manera de entrar en calor es tomando una taza de un bebestible tibio o caliente, ya sea una infusión o agua. Esta alternativa tienen un efecto temporal en la temperatura del cuerpo. Además, tiene un efecto calmante en el organismo. 

Sin embargo, no es buena idea consumir te o café, pues la teína y cafeína son estimulantes del sistema nervioso, lo que disminuye el sueño. 

¿Pijama de polar o algodón?

Si bien el pijama de polar es popular por su suave textura, la verdad que es que la tela de algodón resulta más conveniente para no pasar frío. Resulta que por más cómodo, barato y ligero que puede ser el polar, es una tela que no absorbe la humedad, a diferencia del algodón o la lana. El tejido polar es sintético, por lo que cuando sudes durante la noche, ese sudor no es absorbido y se enfría sobre tu piel. Podrías resfriarte. 

En cambio, el algodón tiene un mejor control de la humedad. Esta tela es transpirable, deja pasar el aire y absorbe la humedad del cuerpo, lo que nos mantiene secos.  En suma es hipoalergénico, por lo que no irritará la piel ni causará alergias. 

Estufa

Las estufas son óptimas para calentar habitaciones, sobre todo si se quiere ahorrar dinero y  no gastar en calefacción central. Sin embargo, su uso adecuado es exclusivamente durante un momento, nunca dejarla prendida al dormir. Si no la apagas, podría tener consecuencias mortales. Recordemos que la combustión se va “comiendo” el oxígeno y, si es deficiente, genera monóxido de carbono (CO), un gas que no se puede detectar porque es inoloro.

De esta manera, el uso de la estufa debe complementarse con un abrigo. La enciendes, y una vez que entras en calor, la apagas y te abrigas. 

¿Ya decidiste qué alternativa prefieres al dormir? Cuéntanos con qué te abrigas en la cama para evitar el frío y obtener un sueño profundo.  Etiquétanos con @flexcl o utiliza el hashtag #flexencasa en las fotos o vídeos que subas a tus redes sociales, utilizando alguna de estas formas de pasar el invierno en tu cama.

Beneficios de dormir con una buena almohada

En nuestro día estamos inmersos en diferentes actividades: colegio, universidad, trabajo, deportes o familia, y una vez que llegamos a casa nos ocupamos de mil cosas pero dejamos de última la más importante: dormir. 

Tener un buen descanso o sueño reparador es fundamental para nuestra salud física y mental, ya que un buen descanso nos proporciona energía y la capacidad de estar activos durante nuestra jornada diaria. Para poder cumplir esto debemos -no solo tener sueño y ganas de tomar un tiempo para nosotros- tener el “equipamiento indicado” para hacerlo. Así es, debemos contar con un buen soporte para nuestro cuerpo (colchón) y un para nuestro cuello y cabeza (almohada). 

Expertos del sueño aseguran que para lograr dormir bien es necesario utilizar una almohada que resulte más ergonómica, para que la misma pueda mantener cuello, cabeza y hombros de tal forma que respete la postura natural de la columna vertebral. ¿Te has puesto a pensar si tu cabezal cumple con este objetivo? Es muy probable que no, por eso es importante incorporar a tu estilo de vida la elección de buenos productos para dormir.  

¿Qué ocurre cuando no usamos una almohada?

De acuerdo a una investigación del Colegio de Optometría de la Universidad Estatal de Nueva York, no utilizar un soporte mientras dormimos puede aumentar la presión intraocular siendo un riesgo para aquellas personas con glaucoma. ¡Sin duda utilizar la almohada correcta hace la diferencia!

Otro efecto negativo de no utilizar un soporte,  es el aumento de riesgo de padecer osteoartritis en el cuello cuando dormimos de lado. Esta posición puede causar que las vértebras cervicales puedan curvarse demasiado y apretar las aberturas de la espina dorsal, provocando que los huesos hagan fricción  uno con otro.

Es importante que elevemos la cabeza y le demos soporte al cuello para evitar una postura antinatural durante nuestra noche de sueños, así podemos prevenir problemas cervicales y de espalda. Durante nuestro día el cuello soporta una gran tensión, por eso al momento de dormir es necesario que adoptemos una buena postura pues, en esta  zona del cuerpo convergen varias articulaciones, músculos y ligamentos.

Mejores modelo para descansar

Cada noche procuramos tener un sueño profundo o combatir la falta de sueño y aunque usamos un soporte para descansar es fundamental saber qué tipo de almohada debemos ocupar y de qué material debe ser.  Aquí algunas recomendaciones para que elijas el soporte de ideal cuando quieras renovar tu cama:

  • Almohada Viscoelástica: Esta almohada entrega un gran soporte, adaptándose muy bien a la cabeza y el cuello. Este material libera los puntos de presión y tiene una  excelente vida útil conservando su forma original aunque se intente deformar. Además, son hipoalergénicas y muy higiénicas ya que la viscoelástica aparta la acumulación de ácaros. Se recomiendan aquellas con funda lavable.
  • Almohada de fibra: Hechas con un material sintético que te permite descansar luego de una larga jornada laboral. Entre los beneficios de este tipo de almohada está la frescura y que evita la multiplicación de bacterias, hongos y ácaros. Este modelo posee diferentes grados de firmeza y son transpirables por lo que no retiene calor. Revisa el gramaje y la calidad del relleno a la hora de comprar.
  • Almohada de gel: Su material de alta densidad la convierte en un soporte muy fino y muy funcional ya que tiene adaptabilidad para la cabeza y el cuello. También, existen alternativas de aplicación en la fibra, ideal para las personas que sufren de calor mientras duermen.

Una almohada para cada persona

Todos tenemos nuestra propia definición de comodidad cuando se trata de dormir, buscando la mejor posición para adecuar nuestro cuerpo con la cama y las almohada. Boca abajo, con una almohada entre las piernas o de lado, hay un soporte para cada forma de dormir. Conoce la almohada adecuada según tu forma de dormir y evita futuras dolencias en la mañana. 

  • Dormir boca arriba: se debe elegir un soporte que de firmeza y que posea un grosor medio. Por lo general se recomienda una altura media para lograr máxima alineación de la zona cervical y dorsal de columna. 
  • Dormir de lado o apoyados de un hombre: se recomienda una almohada gruesa, firme y de altura alta o media alta esto, con el fin de que el cuello sea una prolongación de la dirección de la columna. 
  • Dormir boca abajo: se recomienda utilizar una almohada blanda y fina que permita que la cabeza quede alineada con el cuerpo y simule la posición vertical. Esta no es la postura más recomendada para la columna debido a las tensiones que genera en las cervicales.

Sin duda un buen descanso determina nuestro desempeño al día siguiente, conocer formas de mejorarlo solo requiere de nuestro esfuerzo. ¡Un buen descanso es un buen día de trabajo!

10 ideas de actividades para hacer en familia ¡Quédate en casa!

Con el pasar del tiempo en casa algunos ya hemos notado que se nos agotan las ideas para relajarnos y divertirnos en tiempos de Coronavirus. Al principio siempre resulta más fácil buscar con qué distraernos puesto que estamos iniciando esta “exploración” de nuevos hábitos, actividades y juegos, sin embargo una vez que ya sientes que las realizaste todas, te quedas sin ideas y el aburrimiento amenaza con regresar a tu rutina. 

¡No dejes que gane! Y mucho menos cuando se añaden a tu calendario días festivos que son perfectos para utilizarlos con el objetivo de comenzar una nueva jornada de entretención, esparcimiento y quién sabe, aprendizaje también. 

¡Jamás pienses que te quedaste sin ideas!

Es más fácil rendirse y dejarse caer en los brazos de la procrastinación cuando sentimos que ya no tenemos tareas nuevas o actividades que nos mantengan motivados para iniciar el día. Pero créenos cuando te decimos que ¡las ideas nunca se acaban! Hoy más que nunca y con los beneficios del internet estamos expuestos a un montón de contenido que nos puede ayudar a armar una tarde increíble en familia o con amigos. 

¿No sabes dónde buscar? No te preocupes, nosotros lo traemos para ti en esta nota. 

 Acá te enseñamos algunas ideas de actividades entretenidas para pasarlo bien ¡sin dejar de cuidarnos!

10 ideas para hacer actividades divertidas sin salir de casa

1.      Jueguen en familia. Es un momento ideal para que los más pequeños aprendan lo que los más grandes de la casa hacían en su infancia para divertirse. Enseñarles juegos antiguos como Carioca, dominó o juegos de mesa hará que todos juntos disfruten y compartan de una vuelta a los clásicos. 

2.      Tengan una noche de Bingo. ¡Organiza una noche de bingo con cartones y grandes premios para todos en la casa! Es una excelente manera de compartir, reírse y activar ese lado competitivo del azar que a todos nos gusta, porque ¡no sabemos quién puede ganar! Y con las herramientas necesarias puedes armar tú mismo los cartones, incentivemos en esta actividad el uso de materiales reciclables. Hoy no es difícil conseguir cartón, puedes utilizar una caja vacía de cereales o una caja de zapatos, tomar una tijeras y ¡tendrás tu primera pieza lista para ser rellenada con los números del bingo! Guíate con alguna imagen en google o inventa tu propio diseño. Como último paso puedes utilizar legumbres o botones para marcar las casillas y descubrir al final del juego quién será el afortunado ganador. 

3.     Disfruten una tarde de cine. Netflix, Amazon prime y muchas otras plataformas permiten ver estrenos de cine desde la comodidad de tu cama. Y si crees que es un buen momento para consentir el estómago, suma a este panorama tus snacks favoritos. 

4.     Hagan un picnic en la casa. Cualquier lugar sirve: el piso de la sala, el living, la terraza o el jardín. Prepara bocadillos, tiende una manta o frazada y deja fluir la conversación a los temas más locos que se les ocurra. ¡Es un buen momento para relatar un cuento!

5.     Realicen proyectos de arte con materiales reciclados. Junta cajas vacías y con un poco de tempera e imaginación, pueden convertirse en autos, robots, maquetas, ¡y en cualquier cosa que se te ocurra! Y para fomentar la creatividad y el trabajo en equipo, ¿por qué no hacer grupos y premiar al mejor proyecto? ¡Queremos ver los resultados! ¡Manos a la obra!

6.    Revisen fotos familiares. La mayoría de las casas tiene muchos álbumes o archivos antiguos de fotos que podemos hojear o revisar en familia y sorprendernos con mágicos recuerdos. A los niños les encanta compartir y preguntar de situaciones familiares en este tipos de actividades, ¡aprovechen de contarles esas anécdotas de verano en familia o la vez en que no dejaron de reír con situaciones embarazosas que vivieron de pequeños! 

7.    Vuelvan a escribir cartas o tarjetas. ¿Y si retomamos el hábito de usar lápiz y papel para contarnos las cosas? No hay nada más nostálgico y mágico que el recuerdo de una carta hecha para alguien que queremos. O mejor aún, cuando recibimos una y la sostenemos en nuestras manos admirando los detalles de una letra única y singular perteneciente sólo a quien la ha escrito. ¿No te dan ganas de suspirar con ese recuerdo? ¿Pensaste ya en alguien a quién hayas mandado una? ¡Incentivemos la escritura! Invita a los a los niños pequeños de la casa a escribir cartas o tarjetas para los tíos o abuelos, y así enviárselas virtualmente o guardarlas para cuando se vuelvan a juntar. Pueden ser con motivo de saludo, celebración, cumpleaños, ¡lo que sea! Regálales esa hermosa sorpresa. 

8.    Cocinen galletas. Siempre la cocina es una alternativa entretenida para los más chicos: Galletas, cocadas, queques o kuchenes. Ideales para disfrutar a la hora del té. Aquí te dejamos un lugar del que podrás sacar ricas recetas fáciles y creativas que puedes hacer con tus hijos. 

9.    Realicen tours virtuales. Existen muchos lugares que se pueden recorrer virtualmente. Google Arts and Culture tiene colecciones de tour virtuales a famosos museos, para pasear sin salir de casa. ¡Que sea una jornada de aprendizaje y descubrimiento!

10.  Construyan legos y puzzles. ¡Es diversión sin fin! Antiguos hobbies olvidados como armar rompecabezas o jugar con los Legos, garantizan momentos de diversión lejos de las pantallas, y mejor aún, impulsan el desarrollo de la creatividad, imaginación y logística. ¡Veamos qué construcciones salen de esto!

¿Ya decidiste cuál será la siguiente actividad en familia? Organízate e invita a todos a aventurarse en una nueva actividad en casa para que compartan inolvidables recuerdos y momentos asombrosos. ¡Y no olvides dejar registro de estas maravillosas ocasiones! Así más adelante podrás disfrutar de ver las fotos o vídeos junto a tus seres queridos. 

¡Compártenos la actividad que decidiste hacer! También queremos ser parte de esta aventura y ver el disfrute que lograste realizar en familia. Etiquétanos por @flexcl o utiliza el hashtag #flexencasa en las fotos o vídeos que subas a tus redes sociales realizando alguna de estas actividades y enseñémosle a todos lo fácil y divertido que es organizar entretenidos momentos en casa. ¡Verás que no eres el único!